La foto en cuestión es la siguiente...
La veo, la reviso y me doy cuenta que en ella aparecen mis dos abuelos y mi tío Chavo, que cargaba a Chavita, porque sin duda tenía que salir en la foto, pero aparentemente estaría medio "chintinoso" como para que estuviera ahí solo. Estabamos ahí, algunos de los nietos de mi abuela Cande y mi abuelo Chava...Especificamente, algunos nietos de 6 de sus hijos, que para ser claros, dos de ellos al momento de la foto aún no tenían bebés, así que al momento del "retrato" salvo un par de ellos que estaban en Michoacán. estabamos todos...
Dándole una nueva lectura a la foto, me doy cuenta de cómo es que todos los que en ella aparecen, descontando por obvias razones a mi Abuelo Chava que en paz descanse, hemos tomado muchos y muy diferentes caminos. Empezando el año, hablé de esto respecto a mi propio nucleo, pero es inevitable al ver la fotografía, pensar en todos y cada uno de los actores que aparecen en ella, en lo que se encuentran en este momento y cuando fue la última vez que tuve oportunidad de hablar con ellos.
Por aquellas fechas, siempre lo recuerdo con cierta añoranza, mi sueño máximo era tener una privada, un lugar como el que ahora efectivamente tiene mi tío Rafa en Manzanillo (Sólo que en aquel entonces sin duda no estaría ni siquiera construido) pero para toda la familia... ¿En qué consistía ese lugar? Era un lugar en el que cada uno de los miembros de la familia tendrían una casa idéntica a la de los demás, la misma cantidad de habitaciones, de autos, de satisfactores pues, que les permitieran estar "holgados" en nuestra "comunidad"... ¿En qué consistía nuestra comunidad? En que una vez que todos por separado, hicieramos nuestras actividades regulares (trabajo/escuela) pudieramos llegar a nuestro "lugar comunitario" y compartir el patio trasero para hacer que la vida transcurriera entre las bligaciones que cada quien tiene, pero que se viera complementada con una eterna fiesta en la que siempre que quisieras pudieras visitar a tus tíos y primos con el simple hecho de recorrer el "parque" trasero.
La segunda vez que me vine a vivir a MTY, llegué a quedarme en la casa de mi amiga Bety y de su esposo Cesar, quienes con una cortesía impresionante me recibieron con una amabilidad y hospitalidad que jamás olvidare, pero el punto es que en el patio de su casa, ellos tienen una pequeña escalera por la que subes y tienes acceso a un parque interior, a la puerta trasera de todos los vecinos...Recuerdo como en esos día (tan distantes del día de hoy en lo que a clima se refiere) recorría los andadores de ese lugar, mientras veía cómo la gente de esas casas realizaba actividades en su patio (carnes asadas/chelas/Etc) y me ponía a imaginar (tanto tiempo despues) que justo era eso lo que yo llegué a desear para mi familia y que obviamente jamás sucedió.
¿Qué es lo que divide a las familias? ¿Qué es lo que impide que sigan juntas como en antaño? Yo recuerdo que cuando era niño, me costaba mucho trabajo pensar que no se pudiera hacer tal o determinada cosa por... ¿Enojos? ¿Discusiones? ¿Disputas? ¿Poder? Y es que hay familias que tienen un matriarcado muy claro, pero hay otras en las que lo que dominó fue el patriarcado...¿Y al no estar en casa? Se terminó la cohesión supongo...
No pierdo la esperanza de poder algún día, tener una reunión familiar en la que todos los miembros de la misma, orgullo, enojo y rencor al lado, podamos sentarnos y disfrutar de los lazos de sangre que nos unen.
Mientras que eso sucede, a propósito de la foto y del tema del día...sólo por ponerlo en perspectiva, el día de hoy que es el cumpleaños de mi hermana Susana (a quien amo profundamente a pesar de no coincidir en muchas ocasiones con ella y que en algunas otras me haga enojar o desatinar), lo primero que hice en la mañana fue marcarle, a uno de sus múltiples teléfonos para ver cuál era el que me respondía y cuando por fin lo hizo, le desee un feliz cumpleaños, le canté la versión corta de las mañanitas, le acerqué el teléfono a Belén y a mis hijos para que le desearan feliz cumpleaños (mientras terminábamos de irnos a la escuela) intercambie algunas palabras y seguí extendiéndole mis mejores deseos. La llamada no duró más de 5 minutos (porque ademas creo que la desperté), pero eso era lo menos importante, lo que era más importante para mi, era hacerle saber a mi hermana, que a pesar de que recientemente hayamos separado un poquito más nuestros caminos, ella está presente, vigente y que forma parte esencial de mi vida. Sinceramente no me veo dejándole de hablar por años, enojándome con ella por cosas sin importancia o guardándole odio o rencor. Lo único que sale de mi corazón para ella y su familia es buenos deseos, buena vibra y desearle la felicidad del mundo, porque sin importar lo que haga o lo que deje de hacer, siempre va a ser mi hermanita, la de la foto, la que me acompaño en mi infancia, a la que asusté, con la que me pelee, con la que platiqué, a la que le queme las greñas de su muñeca, a la que le rompí la barbilla por "mal cuidarla" mientras andaba en su bici (o algo así), mi complice de nalgadas y de miles de aventuras y de experiencias únicas e irrepetibles que sólo provocan seguir cultivando ahora a la distancia, la relación que tengo con ella y que espero tener hasta el último día de mi vida. ¡Felicidades Flaca! ¡Te quiero mucho! y espero que pronto nuestras condiciones sean mejores para que por fin podamos estar todos juntos como familia (por lo menos nosotro ¿no?).
Antonio "Pichojos" Mendoza.
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